Se han ido sin un adiós, sostenidos por las manos de esos sanitarios a los que tanto debemos. Queremos ofrecerles nuestro recuerdo y nuestro homenaje. Y la seguridad de que nunca los olvidaremos

Manolo le dijo a Angelita que no echase la llave, que volvería pronto. Maricarmen dio el almuerzo a su marido Jaime en el hospital y salió a comer. Cuando regresó ya no pudo verlo. No volvió a verlo con vida. , dice Angelita. También a Fina se la llevó un «ladrón invisible». Así lo siente su hijo. Gallegos robados. Arrebatados por un virus inesperado. Sin despedida. Solo sostenidos por las manos exhaustas pero firmes y sanadoras de los sanitarios. Este es el homenaje de sus familiares. Este es el homenaje de La Voz a esos gallegos robados. Las víctimas del covid-19.

Recordando a...